Cuando pensábamos que no se podía ir más abajo en nuestro ya
vapuleado país, el presidente Peña, da visos de que cuando se trata de hundir
al país, él y su equipo nos ponen la muestra.
En el rubro económico, el hecho de ser discípulo salinista,
le está cobrando factura, haberle apostado a reimplantar las ideas neo
liberales que el tristemente célebre ex presidente le debió haber aconsejado,
son a todas luces fallidas en un estado cuya economía sigue sostenida por
alfileres.
Las dichosas reformas, que tanto necesitaba el país a decir
del mandatario y que afectan a las clases más populares y desprotegidas, han
sido devastadas por el negro panorama económico global.
En el área de seguridad, el único avance que se ha visto, es
que se ha puesto al descubierto que, la mayoría de los municipios en el país están
gobernados al amparo del crimen organizado, a esto agregue usted la represión
que sufren aquellos grupos que, hartos de la inseguridad decidieron organizarse
independientemente para hacerle frente a los criminales.
En muy corto tiempo la popularidad del presidente se ha ido
en picada, asuntos como Ayotzinapa, la casa blanca, y ahora súmele el hecho de
haberse anunciado que el país hoy sufre el peor endeudamiento de su historia.
La cancelación de importantes obras que serían sello
personal de este gobierno, han sido cancelados o pospuestos y el recorte al
presupuesto a todas las dependencias es un hecho.
No al tren rápido, o al tren transpeninsular, no sabemos si más
adelante la obra del nuevo aeropuerto de la ciudad de México tenga que sufrir también
el mismo destino.
Es increíble que un país productor de petróleo como el
nuestro sostenga precios de gasolina a la alza cuando las tendencias indican el
sentido contrario.
A esto agréguele la era de auténtico terrorismo fiscal que
se está viviendo con un sistema que quiere saber de dónde viene tu dinero y en
que te lo vas a gastar, lo que ha deprimido el consumo interno y lejos de
aumentar la recaudación ha provocado un efecto negativo, cada día más gente
huye de la fiscalización.
Este es el auténtico “DesPeñadero”, la “señora de la casa”
tiene un verdadero desgarriate a tal grado que no va saber por dónde comenzar
la verdadera recuperación de la economía mexicana, y por si fuera poco, aquel “Saving
Mexico” ya no será una portada pagada en una revista internacional sino un
verdadero clamor popular…o, ¿Cómo la ve usted?